Los afiches de Camilo Mori

Pintor, muralista, académico y figura central de la escena cultural chilena, Camilo Mori Serrano (1896 - 1973) tuvo una destacada trayectoria como afichista, ilustrador publicitario y portadista de libros y revistas, ámbito en el que fue reconocido internacionalmente, siendo uno de los pioneros del cartel chileno y primer presidente de la Unión de Cartelistas de Chile.

Gracias a donaciones de la familia Mori y del investigador Alejandro Godoy, y a adquisiciones recientes, el Archivo de Gráfica Chilena de la Biblioteca Nacional reúne un importante colección vinculada al trabajo gráfico del artista. Este acervo incluye bocetos originales de sus carteles, además de afiches de edición original, fotografías, reproducciones, recortes de prensa, documentos y escritos sobre su labor.

A través de este material, es posible observar el cuidadoso trabajo de composición, color y tipografía en los carteles de Mori, además de comprender su proceso de trabajo al comparar bocetos y afiches finales, y las diversas tendencias artísticas que incorpora.

"El cartel no es decoración ni tampoco pintura. Debe tener primero y sobre todo un considerable poder llamativo para atraer el ojo que se distrae o mira a todas partes. El cartel debe ser, en cierto modo, un accidente visual", escribió Mori en el texto "Sobre el cartel" en los años 40. Consciente de las dificultades que implicaba dominar el arte del afiche, el artista viajó en 1928 a París para especializarse en cartelismo, lo que le permitió conocer el trabajo de maestros como Julet Cheret y Cassandre, influencias fundamentales en su trabajo.

De regreso a Chile realizó afiches publicitarios para marcas locales e internacionales, siendo convocado posteriormente a la sede de Nueva York de la farmacéutica Bayer para integrar su equipo de publicidad. Sus carteles también dieron cuenta del activo rol del Estado y de las políticas públicas de los gobiernos radicales en la promoción de los productos nacionales, entre ellos el salitre y el vino, procesos de urbanización y construcción de viviendas, censos, campañas de salud y ahorro, y contra el alcoholismo.

Durante esa época, su obra fue reconocida en el extranjero. En 1937 recibió un premio en Concurso Internacional de Afiche y en 1942 obtuvo una mención honrosa en el certamen Un hemisferio unido del Museo de Arte Moderno de Nueva York.

Mori creó además carteles vinculados a diversos aspectos de la vida moderna, en especial la prensa, turismo y medios de transportes con Ferrocarriles del Estado, Lan Chile y líneas de vapores. En ámbito editorial trabajó tanto en la promoción de periódicos como en lailustración de libros y el desarrollo de portadas, rol especialmente logrado en una serie de cubiertas para larevista Zig-Zag. También incursionó en la difusión de eventos artísticos y musicales, festivales, actividades conmemorativas y deportivas. En propaganda política realizó afiches para campañas de apoyo al sufragio femenino, el partido Comunista y la candidatura de Salvador Allende.