Siete Órganos musicales Cavaillé-Coll (Órgano de la Iglesia de la preciosa Sangre de Santiago)

Aristide Cavaillé-Coll (1811-1899) fue un luthier francés considerado como el más importante constructor de órganos de todos los tiempos. A lo largo de su vida diseñó y construyó 685 órganos musicales, diez de los cuales llegaron a Chile las últimas décadas del siglo XIX. De estos diez órganos únicamente se han preservado siete, que en la actualidad se encuentran localizados en iglesias en la Región Metropolitana y Valparaíso.

Se trata de un conjunto de instrumentos musicales litúrgicos que datan del siglo XIX, y hasta la fecha conservan la mayoría de sus piezas originales: cajas y otras piezas de madera de encina, teclados enchapados en marfil y tubos de estaño, entre otros. Cabe destacar que cada diseño y elaboración de estos órganos estaba asociado a las condiciones acústicas y espaciales específicas de las iglesias a las que estaban destinados, por lo que se trata de piezas únicas. Esta característica los hace poseedores de una doble dimensión artística, tanto desde la perspectiva instrumental, como bienes de un alto valor histórico-estético.

Los instrumentos fabricados por este artista llegaron a Chile previo a la Guerra Civil de 1891, gracias a la buena situación económica de ciertas congregaciones religiosas. En su mayoría fueron órdenes que contaban con sus casas centrales en Francia y conocían el talento Cavaillé-Coll. Pertenecen específicamente a la Iglesia de los Sagrados Corazones de Valparaíso; en Santiago la Iglesia de la Preciosa Sangre, la Parroquia del Carmen, la Iglesia de los Capuchinos, La iglesia de San Pedro, y la del Convento del Buen Pastor; en San Felipe El Santuario de Lo Vásquez.

Por tales atributos estos órganos fueron declarados Monumento Nacional el año 2013. Cabe señalar que a pesar de que muchas de las iglesias en donde se encuentran han sido previamente declaradas patrimonio nacional, bajo la categoría de Monumento Histórico, sus órganos cuentan con una protección independiente. Si bien están adheridos a estos inmuebles, su valor patrimonial excepcional y específico es independiente del valor propio del templo religioso. El objetivo es que se pueda trabajar tanto de forma individual como en conjunto la puesta en valor de estos importantes instrumentos musicales, en contexto con el espacio donde se emplazan.