Entrega de conocimientos destinados a desarrollar la capacidad intelectual, valórica y afectiva de las personas, de acuerdo a la cultura y a las normas de la sociedad a la que pertenecen.
Esto quiere decir que en las escuelas no solo nos educan para saber lenguaje, ciencia y matemáticas, entre otras muchas cosas, sino también para que aprendamos a vivir más felices y en colaboración con otros, al interior de nuestra respectiva sociedad.