El descubrimiento es un testimonio directo de la navegación ancestral en el Waljmapu y revela el fino trabajo en madera realizado por el pueblo mapuche.
En diciembre de 1995 se encontró de forma casual un wampo o embarcación mapuche sumergida a menos de cuatro metros de profundidad en el lago Lanalhue, provincia de Arauco, Región del Biobío. El hallazgo ocurrió cuando trabajadores de la hostería homónima sacaron el ancla de una lancha y arrastraron junto a ella la canoa.
El personal dio aviso a la directora de la época del Museo Mapuche de Cañete, Gloria Cárdenas, quien se contactó con el Centro Nacional de Conservación (CNCR) para definir un plan de intervención, y con el Museo Regional de la Araucanía pues en su colección había una pieza similar.
El estudio de la embarcación reveló que se trataba de una canoa fabricada a partir de un solo tronco, de 4,85 metros de largo y 80 centímetros de ancho. Fue elaborada con laurel, madera de características blandas y fácil trabajo y de gran importancia simbólica para el pueblo mapuche (Lira, Diaz-Vaz y Muñoz 2012).
En marzo de 1996 se trasladó al Museo, previa construcción en sus predios de un estanque forrado con polietileno, con el fin de trabajar en su conservación y restauración.
El proceso se extendió hasta el 2001 y se realizó gracias a los esfuerzos conjuntos de funcionarios de la institución y del CNCR, y a la donación de polietilenglicol por parte del Instituto Nara de Japón, producto empleado para preservar maderas humedecidas.
El wampo de Lanalhue fue la primera experiencia en el país de salvataje arqueológico en un área lacustre y de intervención de madera sumergida por un período prolongado.
Este hallazgo y otros similares confirman los relatos de los cronistas sobre el uso de embarcaciones en el pueblo mapuche, práctica desarrollada con frecuencia desde antes del arribo español.
Producto de estos descubrimientos el Estado firmó, en 1999, el decreto de Patrimonio Cultural Subacuático mediante el cual declaró "Monumento Histórico [a] toda traza de existencia humana que se encuentre en el fondo de los ríos y lagos y en los fondos marinos que existen bajo las Aguas Interiores y Mar Territorial de la República de Chile, por más de cincuenta años" (Ministerio de Educación 1999: artículo 1).
En 2006 el wampo se integró a la museografía de la institución y hoy se exhibe en la sala Nometulafken, El viaje de búsqueda, soportado por una cama de metal especialmente construida para su adecuada conservación.
Canoas sumergidas: investigación arqueológica de los wampo
La navegación mapuche cuenta con escasas pruebas directas debido al limitado desarrollo de la arqueología subacuática y al hallazgo descontextualizado de embarcaciones y herramientas asociadas.
Manufactura y usos históricos del wampo
Construido colectivamente, el wampo se utilizó para transportar pasajeros y carga, intercambiar productos y realizar actividades cotidianas de pesca y recolección
Una historia desconocida: navegantes mapuche lavkenche
La práctica de navegación históricamente se ha circunscrito a los pueblos del norte o extremo austral, debido a su escaso estudio en los habitantes de las actuales IX y X regiones.
La embarcación hallada en el lago Lanalhue se encontró incompleta y en un avanzado estado de deterioro. Gracias al plan de rescate, hoy se exhibe en la sala 5 de la institución
En marzo de 1996, el wampo descubierto de forma casual en el lago Lanalhue se trasladó al Museo Mapuche de Cañete previa construcción de un estanque techado en el patio de la institución
Hasta el momento, es la única embarcación hallada en territorio chileno que ha sido objeto de un trabajo científico de conservación posterior a su extracción