Concurso Internacional de Arquitectura Palacio Pereira

Fuente: Museo de Artes Decorativas

El concurso tenía por objetivo seleccionar el mejor anteproyecto de arquitectura para la restauración del Palacio Pereira y la propuesta de la ganadora "resolvió de muy buena manera los niveles de intervención que se exigieron en las bases", manifestó Magdalena Krebs, directora de Dibam, entidad mandante en este proceso.

Este emblemático Monumento Histórico, cuya restauración es parte del Legado Bicentenario -una iniciativa del Presidente Sebastián Piñera-, será destinado a albergar las oficinas centrales de la Dibam, del Consejo de Monumentos Nacionales y de la institucionalidad patrimonial-cultural de Chile.

El Legado Bicentenario busca rescatar espacios públicos con historia, con gran valor simbólico y vinculados a la identidad nacional, con el fin renovarlos y devolverlos al uso de la comunidad para contribuir a mejorar la calidad de vida de los chilenos.

Los 31 proyectos participantes son exhibidos, desde el 10 de Diciembre, en la Recoleta Dominica (Recoleta 683). Se entregaron tres premios y dos menciones honrosas, el ganador del concurso recibió $40 millones y se dispone de $210 millones para el desarrollo del proyecto de arquitectura y especialidades.

El histórico edificio, ubicado en Huérfanos 1515, una antigua residencia familiar de características neoclásicas construida en 1874 por el arquitecto francés Lucien Ambroise Henault, cuenta actualmente con 1.799 m2. El proyecto contempla dos fases simultáneas, la restauración del edificio patrimonial y una nueva obra, las que deben complementarse entre sí como una unidad arquitectónica, alcanzando una superficie total de aproximadamente 5.700 m2.

Para el proyecto de restauración del Palacio, cuyo concurso se falló, se plantearon distintos niveles de intervención. La fachada y el crucero serán ser restaurados de la manera más fiel posible al original, mientras que los recintos interiores contemplarán intervenciones funcionales, cuidando que se mantengan su espacialidad y nobleza material.

Para el edificio nuevo, se ideó una solución que recuperará la tipología del edificio original, en un lenguaje contemporáneo, buscando una adecuada solución a los puntos de conexión entre el edificio histórico y el propuesto.

El concurso fue organizado por la Dirección Nacional de Arquitectura del Ministerio de Obras Públicas y su calificación estuvo a cargo de un jurado compuesto por cinco instituciones: el ministro de Obras Públicas, la directora de la Dibam, el director Nacional de Arquitectura del MOP, un arquitecto del Colegio de dicha orden y un arquitecto representante de los concursantes.

Los otros anteproyectos premiados fueron:

Segundo Lugar, Tomas Prado Lamas y equipo.

Tercer Lugar, Cristián Undurraga Saavedra y equipo.

Menciones Honrosas, Pedro Alonso Zúñiga y Albert Tidy Venegas con sus respectivos equipos.