Catálogos
En esta sección difundimos los catálogos de algunas exposiciones montadas por el equipo del museo en la sala Challanco (Textiles de Chiloé y La quilineja y la familia Marilicán), y de temas específicos introducidos en la muestra permanente (Los navegantes holandeses en las costas de Chiloé, 1600 y 1643).
Estos catálogos son el resultado de investigaciones que han permitido profundizar en el conocimiento del pasado y el presente del archipiélago.
TEXTILES DE CHILOÉ
Esta exposición fue concebida a partir de las colecciones del museo adquiridas por Alfredo Gahona el año 1995, de la diseñadora Marcia Mansilla y de otros coleccionistas de Chiloé. El montaje se centró en una investigación de fuentes documentales realizada por la directora del Museo sobre el desarrollo de esta tradición artesanal en el archipiélago.
Tanto la muestra como el catálogo se dividen en dos ejes: los aspectos técnicos de la tradición textil y el desarrollo de la vestimenta. El primero se inicia con la esquila, pasando por el hilado, el teñido y el tejido, para terminar con una mirada centrada en las cobijas. El segundo eje se centra en las vestimentas como representantes de este arte textil. Se entrega una mirada con ilustraciones y descripciones de los siglo XVII, XVIII, XIX y XX para culminar con la simbiosis entre las técnicas ancestrales y el diseño de vestuario contemporáneo expresado en el trabajo de la diseñadora Marcia Mansilla.
Este trabajo está dedicado a todas las tejedoras de Chiloé y especialmente a la memoria de la tejedora ancuditana Melania Cárdenas fallecida a mediados del año 2006.
LOS NAVEGANTES HOLANDESES EN LAS COSTAS DE CHILOÉ (1600 Y 1643)
Chiloé vivió dos incursiones de corsarios holandeses durante el siglo XVII. En el año 1600 llegó a la península de Lacuy la embarcación "De Trow" (La Confianza) al mando de Balthasar de Cordes, en busca de alimentos para una tripulación al borde de la hambruna. Los holandes establecieron alianza con la población local -a quienes llamaron chilenos- contra los españoles. Una segunda incursión, dirigida por el almirante Hendrick Brouwer, se guió en la información recabada durante la estadía de La Confianza y tuvo como objetivo establecer una colonia holandesa en el sur de nuestro país.
De estos hechos nos han quedado muchos testigos documentales (material de archivo, impresos, dibujos, cartografía) que reflejan la importancia de estas incursiones para holandeses y españoles.
El Museo se atrevió a ir más lejos y no sólo revisó fuentes documentales, sino que hurgó también en la memoria colectiva del Chiloé del siglo XXI, en busca de antecedentes que hablaran de la presencia de estos corsarios.
Para la realización de este proyecto, el Museo contó con el apoyo de la Embajada Real de los países bajos, FONDART, DIBAM y la empresa Skretting.
LA QUILINEJA Y LA FAMILIA MARILICÁN
La quilineja es una enredadera leñosa, "siempre verde que se adhiere a los troncos por medio de raíces finas" (Enciclopedia de La Flora Chilena). Sus tallos son delgados, muy ramificados, flexibles y resistentes, y nacen "de un rizoma subterráneo. También crece a ras de suelo, cuando no encuentra un soporte." (Enciclopedia Cultural de Chiloé)
La cestería es un oficio tradicional en el que se han utilizado diversas fibras vegetales y, en la actualidad, material sintético. En Chile, las fibras vegetales más comunes son la totora, el mimbre, la paja de trigo, el chupón, los tallos del copihue, la ñocha, la caña, el boqui y la quilineja. Siendo estas dos últimas muy comunes en Chiloé.
Antiguamente con la quilineja se confeccionaban variadas piezas de uso cotidiano: canastos, escobas, sogas para embarcaciones, cercos, etc. No obstante, con el pasar de los años, las generaciones de artesanos han ido realizando innovaciones, ya sea por necesidad o por apreciación estética. De esta manera, han ido apareciendo diversas piezas ornamentales.
El presente catálogo da cuenta de todo el proceso que implica este oficio: desde la recolección de la quilineja en el bosque, hasta las formas de comercialización.